La indiferencia ha sido derrotada
por grilletes de todas las derechas
y despierta en el fondo de este invierno,
lo mejor de nosotros,
aquella humana esperanza,
límite más allá de la paciencia,
música que todo lo iguala.
Los muertos han regresado a esta Alameda
y una tromba de indignados
barre nuestros cuerpos dormidos,
levantándonos como banderas,
sobre la tierra malquerida.
Los muertos han abierto sus tumbas
y piden los verdaderos nombres del cielo,
poema testigo de esta historia,
números que comprenden el círculo,
raíz azul de las palabras,
sol disolviendo su tristeza.
Este poema se inspira en la ocupación espiritual de nuestros estudiantes sobre la Alameda, efectuada ayer viernes 24 de junio.
Es maravilloso que coincida con el renacimiento del sol austral en este solsticio.
Puede apreciarse en el
siguiente video subido a youtube por FalconSWAT