Hogar de Humanidad

Cada noche llego a casa y están mis hermanos.
Celebran  vida y  sol.
Bella geometría de lo justo.
Aurora del compás.
Trabajos del hombre sobre su espíritu.
Nuestro fuego siempre encendido.


En la fotografía, taller masónico en La Habana.

Salvador

Hoy te vi Salvador
Elegiste mirarme desde la bruma.
Levantar el sol con tu fuerza.
Regalar tu alegría,
Amparar la tierra con tu sonrisa.

Concentrado

En este cuarto sin ventanas
la aurora debo ser yo
llevar luz en ms  ojos
ser música
Sol en mi Tierra interior.



La imagen proviene de este sitio.

5 de octubre

Aún tengo a mis padres
Miradas de Isidora.
La aurora que es mi amiga.
Heridas de voz en mi cuerpo.

Francisco y Ernesto en Peñuelas

Francisco camina en este bosque.
Mira  aves y se eleva.
Torna sereno el aire frio.
Desciende al Lago y visita  peces.
Recibe bromas de mariposas.
Hace prístina la aurora.
Agradece el honor del caballo
los juegos del zorro
el idioma azul del guanaco.

A Francico lo sigue un espíritu.
Ernesto amigo de primaveras
Pequeño guardián de lo sencillo.
Ser  gentil .
Bello animal que sueña.

Espíritu del bosque

¿Has visto el espíritu del bosque?
Estrellas que endurecen su rostro.
Viento de piedras.
Tu rabia.
Sendero en que nacen las miradas.

Isidora, mi abuelo y Próspero

Isidora navega por el nueve.
Pinta  orejas del ocho.
Busca 32 y quizá 33.
Números de su abuelo Gustavo.
Hombre que mastica primaveras.
Breve geometía de la escuela.

¿Por qué no 50 como los viejos del mediterráneo?
49 que es más secreto
12 y 13
Hróscopo
Vivan las lunas del año.
Vivan mariposas y cabreros.

¿Ubicas la hora sexta?
Aquel antiguo mediodía.
Calibán observando a Próspero.
Nuestra barca cargada de libros
Abrid la puerta a mis delfines.



En la imagen, aparece una actriz encarnando a Sycorax.

Proviene de este sitio.

Decisiones

Cada día elijo estar vivo.
Es la más sencilla decisión.
Elijo ser el padre de Isidora.
Elijo mis silencios.
Varios de mis errores.
Los sellos de luna que marcan mi cuerpo.

Noche del 30 de septiembre

Estoy limpia de lunas
Clara/ Estrellada/ Invisible
Hoy rozo el mes de octubre.
Hablo a extraños poetas.
Crece en mí la primavera



Para Carla Jofré en su cumpleaños.
Tu noche Carlita.

En la imagen, "Noche estrellada sobre el Ródano", de  Van Gogh.

Reducción

Me reduzco.
Disipo mi risa y mis manos.
Salgo de tu mundo.
Apenas quedo en la aurora.
Apenas te sigue mi perfume.

Cínicos

Los cínicos tienen su propio asteroide.
No abundan los hijos.
No existen libros ni tablets
Hay poquísimas escuelas.
No hay hospitales ni peluquerías.
La gente come frutas y raíces del campo.
cada uno a cargo e sí mismo:
disfruta el sol en las playas.
muere siempre a su hora.
evita la sombra de los  generales.




Este domingo, uno de los primeros regalos de Isidora fue una pregunta ¿Qué es ser cínico?
Para responderle, le pedí que leyera un fragmento de "El Libro de Sofía"


La obra de Jean-Léon Gérôme, proviene de  este sitio.

27 de septiembre 2015

La bicicleta se encorva
y trata de  tumbar a Isidora,
pero la niña resiste
se equilibra
surca el espíritu de la tierra.

Ajedrez

Siempre hay un momento en que las blancas pueden ganar.

A nosotros, nos tocó jugar con las negras.



La imagen proviene de este sitio.

Niña alegre

Isidora está llena de alegría.
Despierta y extiende su cariño.
Niña que sonríe.
Pequeña de flores.
Chiquita que juega ajedrez.

Dios nos salve de los políticos

Dios nos salve de los políticos
dice quien  no paga sus gabelas
el obrero que no alza su martillo
el artista que no crea
el maestro que no enseña
el tribuno que renta sus votos
el juez que que cierra sus ojos
el ser que abandonó la primavera.

¿Y quién no salva de nosotros?
Del infinito no  estar.
No ser en comunidad.
Ausentarse de la Polis.
Renunciar a la aurora.
Olvidar las esencias.
Igualdad de la escuela.
Sangre que grita en estas tierras.


La fotografía de la cámara de los comunes británica proviene de  este sitio.

Egoístas y Ególatras

Artistas del orbe
hablan de  sí mismos
elogian la claridad de sus ideas
denostan el lenguaje del vulgo
subrayan su humildad
infinita coherencia
presencia del espíritu en sus actos
egoísmo brutal de las clases dominantes.

Erótico y Doméstico

Al llegar a  casa
me ordenan peinar el gato
afeitar  axilas del mono
hacer dormir la iguana
servir te al horizonte
prestar mi sombra a las mariposas
anudar los silencios del burro.

Todo lo hice con gusto
hasta que Bisha  - nuestro gato-
volcó su cabellera en la aurora
mis monos cavaron sus tumbas
la iguana enfermó de ternura
el horizonte no vino a mi tarde
mariposas robaron mi sombra
el burro sorprendió con su brindis.




En la imagen, Circe, de Claudio Bravo.

Proviene de este sitio.

Sólo un hombre

Hoy vestí camisa de temblores.
La llevé como bandera.
Saludé con ella a mi sol.
Fui un perfecto payaso.
Algo bueno, para ser sólo un hombre.

Nuestra maldición

Quiero deshacer el hechizo
Salvar el fuego del horno
Regresar la ola a su centro.
Herir la estrella que turba.
Lavar la aurora que nombra.
Reformar el tiempo
Llenar de sol tu dolor.

Habrá que sanar  nuestra luna.
Remendar el quebranto.
Liberar el otoño,
Perdonar las espinas.
Elegir la premura
Prescindir del paje
Castigar la traición.

Todo podré rescatarlo,
salvo la primavera.
Ella dormirá sobre las piedras.
Perderá su perfume.
Será tierra su flor.



Este exto conversa con Violeta Parra en:









Maldigo del Alto Celo







Maldigo del alto cielo

la estrella con su reflejo,

maldigo los azulejos

destellos del arroyuelo,

maldigo del bajo suelo

la piedra con su contorno,

maldigo el fuego del horno

porque mi alma está de luto,

maldigo los estatutos del tiempo

con sus bochornos,

cuánto será mi dolor.




Maldigo la cordillera

de los Andes y La Costa,

maldigo, señor, la angosta

y larga faja de tierra,

también la paz y la guerra,

lo franco y lo veleidoso,

maldigo lo perfumoso

porque mi anhelo está muerto,

maldigo todo lo cierto

y lo falso con lo dudoso,

cuánto será mi dolor.




Maldigo la primavera

con sus jardines en flor

y del otoño el color

yo lo maldigo de veras;

a la nube pasajera

la maldigo tanto y tanto

porque me asiste un quebranto.

Maldigo el invierno entero

con el verano embustero,

maldigo profano y santo,

cuánto será mi dolor.




Maldigo a la solitaria

figura de la bandera,

maldigo cualquier emblema,

la Venus y la Araucaria,

el trino de la canaria,

el cosmos y sus planetas,

la tierra y todas sus grietas

porque me aqueja un pesar,

maldigo del ancho mar

sus puertos y sus caletas,

cuánto será mi dolor.




Maldigo luna y paisaje,

los valles y los desiertos,

maldigo muerto por muerto

y el vivo de rey a paje,

el ave con su plumaje

yo la maldigo a porfía,

las aulas, las sacristías

porque me aflige un dolor,

maldigo el vocablo amor

con toda su porquería,

cuánto será mi dolor.




Maldigo por fin lo blanco,

lo negro con lo amarillo,

obispos y monaguillos,

ministros y predicandos

yo los maldigo llorando;

lo libre y lo prisionero,

lo dulce y lo pendenciero

le pongo mi maldición

en griego y en español

por culpa de un traicionero,

cuánto será mi dolor.



La canción en la voz de Violeta




La canción en la voz de Nicole, Javiera Parra, Denisse, Monik





La canción en voz de Pascuala Ilabaca






















La fotografía proviene de este sitio.

Cabaña en Peñuelas

¿Qué escribe la primavera?
Octubre en cabañas del lago.
Isidora  en pedales.
Dieta de habas y cebolla.
El bosque para mis pasos.
Viaje a la boda de Adriana.
El tímido hablar de las estrellas.




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