He pensado en vestirte de rosa
Amada reina ojiverde
Encender la piña con gin
Sumar cassis y angostura
Al modo de los viejos benedictinos
Buscar un espacio para lo antiguo
Luz y oscuridad del género enclaustrado
He pensado en vestirte de rosa
Amada reina ojiverde
Encender la piña con gin
Sumar cassis y angostura
Al modo de los viejos benedictinos
Buscar un espacio para lo antiguo
Luz y oscuridad del género enclaustrado
Es domingo y trabajo
Cierro el azul de los cielo y continúo estudiando
Gestando chispas de justicias
Desafiando los poderes del hierro
Creando el jardín y el hogar de la luz
Antes del mar
chispazos
fulgor en la Sinfónica Juvenil
Paolo Bartolomeolli en su salsa
conversando con niños
invocando sus siete años
ese encuentro con la fuerza de Beethoven
Juzgo al amor por sus silencios
Lo mido por sus verbos
Por su forma de tocar
Por la estrella que crea en mi conciencia
He escrito mi vida sobre olas de mar
Y llegué al fin de mis nombres
Frontera de mi pulso
Ribera oriental
Punto en que nace la luz
Volver a Chile
Regresar en primavera
Llegar a los ojos de mi hija
Su casa de regalos
Sus ganas de estar conmigo
Volver a Chile
Regresar a mi hogar sobre el Océano
Mi trabajo de hacer justicia
Crear belleza
iluminar la tierra
Volver a Chile
Saludar nieves y rocas eternas
Cruzar entre justos e injustos
Entregar mis piedras del Jordán
Mis fragmentos de la Academia
Un pedazo de Acrópolis que traigo para Pümpin, don Rodolfo.
Algo nos condujo a las ruinas de la Academia
El espíritu de aquel bosque
El pensamiento
Cierta alegría en sus higueras
El corazón griego de Marta
Nuestra luz cruzando laberintos de Atenas
Bendita Atenas porque soporta a sus taxistas
y rescata el tiempo en el Museo de la Acrópolis
tanto dedal y lámparas
frisos que luego fueron puzles
casas en que vivieron tantos
fuentes que antes visitó tu espíritu
música y danza
escena en que gané mil aplausos
Nuestro Asalto a Santorini fue tranquilo
Lo esperamos almorzando en la terraza de Proa
Aguardando nuestro número 12
Tres cruceros asediando un barranco
Cuando al fin llegamos
Decidimos evitar el cable y sus dos horas de espera
550 escalones
El viejo camino de las mulas
Subimos con calma y mucha agua
Los rostros rojos
Compañía mexicana
Café Freddo con vista al mar.
Cerca del funicular
El acierto de los choros
Su caldo con tomillo y aceite
Sabor de otro mundo
Vino rosado de Grecia
Antes de bajar
Terraza de atardecer
Carola fulgurante
El cielo en brebaje de piña
Sentir el sol en nuestro viaje
Descender amparados por Media Luna
Cielo de pocas estrellas
Imitar el zigzag de las mulas
Conversar con el tenor
Celebrar en el bar de cristal
Descansar de Israel disfrutando Patmos
Sus sillones para maridos
Mil cositas para Isidora
San Juan instalado en su Luz
Me gusta la luz de Chipre
Me gustas tú en Chipre
Tanto calor en la ribera
Helado en nuestras bocas
Vehículos bajo la regla inglesa
Un café con serbios
Un anillo en tu mano
Primer encuentro con las mulas
La jornada en que nos sumergimos en el Jordán
fue comenzada en Haifa y sus jardines colgantes
junto a Elías en el monte Carmel
belleza de todo lo Bahai
casita de María en Nazaret
En los ojos el Monte Tabor
Horizonte de Armagedón
Aguas que emergen en Galilea
y viajan a través de su río
allí donde mojamos nuestros cuerpos
extrajimos sus piedras
luchamos contra sus pequeños y hambrientos peces.
Por supuesto, hubo multiplicación de vino
La noticia del pan que a todos alcanza
Montaña de las Bienaventuranza
Hermandad entre Paz y Virtud
Excepcional aquella colina
se respira paz y belleza
el espacio aún vibra
las aguas aún destellan la Luz
Un aire celeste golpea con su belleza la ciudad de la paz
En Getsemaní y la meditación del Maestro
Un jardín sembrado por papas
Piedras blancas que recogieron mis manos.
En lo alto
El domo de la roca
El profeta se eleva a las estrellas
La ciudad lo mira en el espíritu
En el muro, las grietas
Los mensajes
Oraciones
Todo abierto a los hombres
Como tanto lo quiso Salomón
Pronto, el comercio
Justo en los costados de la vía del dolor
Espíritu vencido por la monedas
Me niego a comprar por respeto al Maestro
Pasos más allá : Monte Calvario
El lugar de las cruces
La preparación del Cadáver
La tumba
Todo demasiado cerca
Alguien manipula la fe
Enseguida Belén
Insignia de Palestino
La cueva del nacimiento
A tan pocos pasos de Jerusalén
Nuestro día sobre el mar
Suave alegría de reposeras
Ascenso a la Acrópolis profunda
Carola sigue a Jesús en miradas de Valtorta
Almuerzo en restaurant de Proa
Conocemos Biblioteca y Capilla Ecuménica
Hamburguesa Vegana
Jornada previa a Jerusalén
Isis, Atenea, es decir La Virgen
Se estableció en un jardín de Éfeso
Hasta allí nos condujo la flauta de Pan
y Pablo VI
cuando en blanco y negro visitó Turquía
Carola encontró una tejedora de alfombras
Estudió su trabajo
Reprochó a los que viven de ella
La abrazó como hermana en el arte
En los pasillos del barco
Trabajadoras de Chile
10 arsenaleras de Clínica Alemana
Guatón Loyola y Cuecas Bravas
Nuestra princesa oriental
Se luce en el salón de baile.
Antes de zarpar
Los zancudos de Platón
Fotografía esencial
Laberinto de llamadas y la tarjeta especial
Desayuno en mesas de Italia
México instalado en el Mediterráneo
Nuestro sol golpeando viajeros
Carola asusta por multitudes
Cantante Israelí en el teatro
Tanta luz en la piscina
Cena de Asia mientras cruzamos el mar-
El sol nos esperó en la Acrópolis
Nos bendijo peldaño tras peldaño
Nos cuidó entre olivos
Nos abrazó en la fuentes de agua
En los teatros
En la terraza que corrigió nuestra sed
Estambul pegado a mis zapatos está.
Camino sobre las nubes
Te vi dichosa en el Hogar de la Memoria
Corona brillante en otro Valparaíso
Ciudad de agua y quebradas
Pozo de imágenes
Sinfonía de labios
Homenaje al presente atado al lenguaje
Tras ello
Caminaste por otro San Enrique
y otro Montealegre
alegraste tu cuerpo con nuevos colores
Subiste a los ojos de Génova
Torre de Cristo
Residencia de miradas sobre el mar
Cumplimiento del sueño de la terraza
Suerte de Campeona
Comida casi francesa
Crepúsculo en las mezquitas
Descenso por Urriola
Mi triunfo en el tranvía
Un deseo llamado Kebab
Gracias Sultanhammet
Noche frente a la Mezquita Azul
El clic de una hija en apuros
Estambul no es bello ni azul
sino infinito
Lo habitan fantasmas de príncipes griegos
mujeres secretas
canes grandes y lentos
taxistas sacados de Dite
gatos de antiguas bodegas
Cardamomo, comino , canela
Cenas de fuego
Orham Pamuk
Herencia del yoghurt
El viento en el alma del Bósforo
Veo el Bósforo y la ciudad brillante
Te encuentro bailando en un yate
Leyendo en el Harem
Sumida en aromas del bazar
Descalza en el jardín del palacio
Mi esposa brilla entre delicias turcas
Es color y sonrisa junto a cien especias
Tiene rasgos de medusa en La Cisterna
Habita el suelo de Hagia Sophia
Tras cruzar las tres petras de aprendices
Aquellas cinco de lo viejos compañeros
Esas 9 que dominan los maestros
Los mismos que desayunan en Pera Palace
o examinan alfombras junto a magos de la venta
Mi espora degusta flores que construyen alcoholes
Cumbres gloriosas del espárragos
El mismo pan pita que probó Agata Christie
En Chile ni la tendalá ni el caos
Tan solo el aliento del mal
Crispación de la palabra
Una guerra sobre el recuerdo
Aquí el aire
Cristóbal vestido de Chile
Campiña francesa
Bordes de Inglaterra
La puerta es 9
Carola viste de rojo
En mi cuerpo, polera azul.
En Estambul
Espíritu en Torre de Control
La puerta es 14
Chilenos desde Líbano
Peruanas de Dinamarca
Sopa de mariscos
Berenjenas
Ibrahim y el arte de ganar
Hoy se fecunda el mediterráneo
Habrá un once sobre el Atlántico
Dos almas tan unidas
Buscando especias y cielos
La gruta de Belén
El lago en que enseñó el Maestro.
Las negociaciones han fracasado
No habrá nueva Constitución
No volverán nuestros ojos
Pero nos espera La Casa de María
Calles de Jerusalem
El museo que refleja un libro
Es viernes antes del domingo
Los pulsos de mi alma están enfocados
Ya canino sobre las olas
Vuelo en mis zapatos
Buceo en grietas y cisternas
Lo que no olvido es el poder de tu alegría
La temporada de risas
Licores rosados en tu alma
El cielo brincando en tu sonrisa.
Caminé bajo la lluvia
Antes del amanecer el cielo se caía
Soplaba húmedo sobre Recreo
Rozaba mi rostro
Elegía vivir en mi cuerpo
Querido Hermano Juan, la primavera ha estado haciendo su trabajo
El viento ha raído las banderas
La tierra ha sancionado a tus huesos
Pero vienes creciendo desde el silencio
Regresas tronando y silbando
Un hombre con sus piernas sobre el cielo
Le expliqué a la muerte sus opciones
-Prefiero esperar, me contestó
Y mi alma regresó desde lo alto
Con una carta de Elías para los juanes
.
La carta decía:
"El cielo reside en construir la justicia"
No entiendo lo que dice la primavera
Pero escucho el rumor de su canción en el bosque
La siento nacer en mi carne
Percibo las raíces agrietando la tierra
y empujando mil colores hacia la patria que sueña
Estamos piel con piel
Sólo un rayo de luna cruza entre nosotros
Hace un último esfuerzo y rebota en el espejo
Lo justo para atraparlo con ojos ojos
Y apretarte aún más
Hasta silenciar su ímpetu de plata
Todos somos dioses hasta que la muerte demuestre lo contrario
y Melilla se rinda ante la estrella del sur
oz y martillo mediante
día de pascua
los maderos de la cruz aún son arbustos en el bosque
Eres luna llena
crepúsculo
brillante lucero
lluvia de estrellas
cometa milenario
galaxia encendida en lo alto
chispa en el inicio de todo
Lo que me salva es tu mirar
La acción de tu piel en mi alma
Este impulso de agosto
Mi hija durmiendo tras la pared
Somos mamíferos que aman la sal
Seres adictos a su sabor
*
Nuestros abuelos salaron el futuro
Hundieron sus cristales en las carnes
La llevaron para cruzar el tiempo
y de paso nos ataron a ella
a sus pequeñas piedras transparentes
joyas en el alma de cada plato
En el edificio citerior
dos hombres tomados de la mano
escuchan a Vivaldi
otro tiempo se ha iniciado
un brío de luz
crece en nuestro lazo de unión
Rosalía Cid como Gilda y Nikoloz Lagvilava como Rigoletto
Cuida a la hija del otro, buen Rigoletto
pues al respetar a esa Gilda
cuidas de la tuya
y haces girar el amor
Despliega tu energía de primavera
Enciende las estrellas
y sirve primero al amor
pues así se extiende tu espíritu
En mi barco, la tarde
Brizna y llovizna
Nuestro mar antes de enfadarse
Nuestra proa eligiendo su destino
Tengo mi manta blanca
Allí marcaré el rostro de mi madre
Los aromas de mi hija
La mañana vestida de cielo
Mi carne está cruzada por el sol
Es el sol
Una pelusa en el fuego
Un destello de conciencia en la luz
Yerro al pensar que me escuchas
Aunque sigo hablando en tu cuerpo
Palpito en tu noche
Voy desde el sur hasta el viento
Lo que ayer era tuyo
Hoy es mi vida que crece
Tu tibieza en mi nombre
El ser con tu sangre y mis sueños
La brisa es tibia
El cielo ya muestra a Venus
Abro para ti la puerta
y un largo pasillo
abrigado por maderas y cristales
presenta nuestros nidos.
*
Allí descansan mujeres
viven la música
escuchan cuentos
conversan
tejen
abre sus ojos al andar de las estrellas
beben hierbas que sus madres bebieron
*
Te muestro mis libros
Los cuadernos de cada paciente
Sus dibujos
El relato de mis manos
sintiendo sus cuerpos
bañándolas
peinándolas
ejerciendo el misterio del abrazo
*
Entonces reconoces me reconoces
No fue necesario pasar a mi huerta de jazmines
Ni exhibir mis telas blancas
Ni mis ojos heridos por la pena
*
Me reconoces y guardas mi secreto
Mira Gonzalo, huele la piel del caballo
recibe el verano en su aroma
su historia de galopes
estrellas que han herido su crin.
*
¿Lo sientes? su corazón late imperioso
Sus ojos han visto otros potros
Allí en la pradera
Casi a la entrada del bosque.
*
Pasan cerca jinetes
Envueltos en rojos y azules
Banderas hiriendo los cielos
Creando un cisma en el aire
Punzando la tierra con su trote de guerra
Metales brillan y duelen
*
Ya han pasado
queda el olor de la hierba
vuelo de mariposas
intensa presencia de luz
sol ascendiendo hacia el centro.
*
Persia
Leila
Me llamaré Leila hasta que tenga el corazón dormido
y se libere de mi la primavera
apagándose mi ruta de estrellas
mi herencia sobre días y horizontes
Luego, me llamaré Leila en tu boca
La haré morder dátiles y moras
frecuentaré tus sueños
desandaré tu vida
Seré Leila en copas de plata
aire en tu barco
bruma que vive en tu Patria
siglos que nos unen y nos atrapan
Leila tiene algo que me remueve
Se presenta como una mujer en Chorrillos
Una niña en Paris
Noche
Palabras y rostros de mi hija
Poema que está por escribirse
Uso herraduras
galopo
llevo rocío en mi piel
rompo el aire con mi alma
soy la sangre que corre
Me duele la gente normal
Aquellos que lavan sus manos con primavera
Compran antes de pensar
Estiran septiembre
Comen cazuela y empanada
Elevan volantines parchados
Faltan en las barricadas
Beben piscola
Duermen en los buses
Sólo leyeron en el colegio
Usan minifalda o lápices de carbón
Callan, son expertos en callar
Antes de nacer he muerto de la risa
o caminado en patios de cárceles
conversando con Oscar Wilde
dibujando un girasol en su frente
bebiendo estrellas con mis ojos
¿Dónde estás abuelito?
A quién llevas en tus hombros
Querida canción de estrellas
Padre de mi madre
Visita de luz en esta esfera
Mi atanor está cruzado por estrellas
Aunque usa cráneo
Gafas
Una cubierta con pocas canas
Uso allí oxigeno
Reserva de experiencias
Temperatura de crucero
Tiempo que cabe en mis silencios
Trece en la mesa
Como aquella que eligió Jesús
Huella en los meses del año
Partes del círculo
Ese que marca nuestro cuerpo
Perdí en mi alma el hilo de las cosas
La palabra elegancia
Algunos dientes de luz
La sospecha y el rumor de mis sombras
Trazo horizontes
Dibujo narices
Un astro radiante en lugar de ojos
Enciendo fuego en la noche infinita
Cuelgo estrellas en su lugar
Hay días y siglos en mi silencio
Huellas de otras vidas
Máscaras de cristal
Golpes del éter sobre la nada
Ellas cantaron
y el orden de las cosas volvió a existir
hubo parras en la tierra baldía
y gardenias florecieron desde el asfalto
Ellas cantaron
y el mar guardó un silencio de estrellas
hubo lágrimas en el crepúsculo
y melodías detuvieron guerras
apaciguaron iras
hubo energía de amor
Lo que no escapa a mi alma
es el sábado en tu pecho
tu cabellera de alegrías
zumbar y latir de tu silencio
galope y ternura de nuestro encuentro
Antes de lo perfecto estamos nosotros
Sucios
Hambrientos
Con miedo
Inclinados por el viento
Pero aún en pie
Ojos en lo alto
Todavía ascendiendo la montaña
Conocí a un hombre en Rodas
No recuerdo si fue mañana
o tal vez dentro de un mes
volaba con cierta dificultad
y parecía herido en su elocuencia
Muestro a las estrellas mis manos de hombre
El libro en que otros pensaron mis sueños
Mi registro de abrazos
Las gardenias que nombro en mi testamento
No muestro mi alma a la primavera
La dejo herido y oscura
La sumerjo en un bolso de compras
Un teléfono
El viaje de tantos que callan en trenes
Nomuestro mi alma
La arrugo como un papel podrido
La incendio en el fuego que viene
La borro con pincel de arrogancia
La pierdo entre billetes y miedos
Empleo el silencio para encender solsticios
El aire parpadea y se marcha
Queda sólo el destino y los rumbos
Frases del destino
Ir y volver a otro plano
Portal entre mundos
Visita a un árbol hecho de canciones
Lo que cuenta es tu alma llena de sol
El ladrido de la tarde
Nuestras campanas
El abierto a la luz
Lo que hoy observé
Abarca pensamiento y cuerpos
La noche
Música
Dominio de los búhos
Plano del ballet
Emociones solares del cisne
Lo que hoy ocurre importa
aunque sea domingo
y tú juegues a nadar conmigo
niña poderosa
ser de risas
primera en la lista de panqueques
bailarina de Coppélia
Reina de las llaves perdidas
Mi padre estuvo en la sonrisa de su madre
En los viejos tranvías
Sausalito 62
Viaje en tren a Buenos Aires
Giras y leyendas del mundo
Aquellos cuatro elementos
Las máquinas de discos
Mucha luz enhebrada a su existencia
El regalo de Daniela en su vida
Aquí vienen nuestros niños a borrar fronteras
Son pozos profundos con fondo en las estrellas
Seres colmados de risa
Valientes como la paz
Intuitivos
Libres, más que sus cuerpos y pensamientos.
*
A Damián le entró la primavera por la piel
En él crecen silencios y alegrías
Sendas sagradas de luz
Abrazo paterno
Cantos lejanos de su madre
Montañas que amarán su mirada
*
Diáfano
Marchará sereno en jornadas de combate
Se unirá a los sueños del viento
Volará ligero y dulce sobre años y volcanes
Conocerá el Árbol de Todos
Vencerá cada día, como lo hace el sol
Vencerá cada día, como el agua que vuelve a nacer.
*
Aquí vienen nuestros niños a borrar fronteras
Son fuegos amados por la vida
Amigos de lo
eterno y lo diverso
Llevan selvas y aves en sus mochilas
Saben tejer la hermandad
*
Ian tiene el cielo
impregnado en su carne
Habla y ríe con horizontes
Está hecho de crepúsculos y claridades
Entrega su ser en las rondas
Regala su yo a las nubes.
Aprende a crear y cantar
*
Intrépido y azul
Conoce el día oculto de la semana
La hora perdida
El minuto que falta al reloj
Tiene cinco años como el buen compañero
Forma un triángulo con sus padres
Obrero risueño en el Taller de la Aurora
*
Aquí vienen nuestros niños a borrar fronteras
Ven sus almas en otras almas
Tienen su piel en la piel del otro
Hablan los idiomas de la tierra
Perdonan antes de enfadarse
Son uno con el planeta
Son uno con la esperanza
Son uno con el hacer justicia
Y crecen amando la
paz.
Gonzalo Villar Bordones
Poeta
Nadie puede decir de mí
Lo que se murmura en Dite
Pues los choros no gritan
Entre toros no hay cornadas
Omertá en el infierno
Lo que pasó entre llamas, allí se queda
La Luna, herida de mil sombras
derrama lágrimas de plata
Líneas de claridad aparecen en la noche
Fulgores los llaman en el barrio
Hilos cayendo a los abismos
Formando círculos
Selene con aspas en su cabeza
Rutas argentinas en este cielo de invierno
Heredé del sol
Una risa estruendosa
Cierto amor por el rocío
Mi piel desnuda
Los rayos que embellecen las ventanas
Nacimiento de una estrella, observado desde el telescopio Alma |
Sumo un Sol de Edén a mis mundos
Una esfera que elige sus destellos
Y me llama padre o Señor del Fuego
Todo ocurre mientras abro sus alas
y reseño el cielo púrpura que la recibe
la eleva
la incrusta en su red de lenguaje
*
Lo hago a través de los símbolos
que también son materia
ondas
trazos de mil pensamientos
Elías toma su carro de fuego
Marcha a España a defender Teruel
Allí sostendrá la tierra que engendra los naranjos
Heredará vientos
Correrá entre toros
Ayudará al sol en sus trabajos
Abrazará un Olivo
Llevará su bordón a las tumbas de Santiago
.....
En Chueca y Lavapiés
correrán sus hijos
sabrán de García Lorca cenando cochayuyo
frontera de Castilla en el Wallmapu
viaje de su sangre en el Winnipeg
ecos del Canto General
hay derecho de vivir en paz
...
La aventura tiene su raíz en Claudia
su premura de luz
llamado de Sevilla y Córdoba
Fiesta de Abril
Granada erguida en sus montañas
Málaga con su rostro en el mar
....
Elías toma su carro de fuego
y marcha hacia Oriente
lo espera la Catedral del Mar
la Casa de Estudiantes
nuestro bar anarquista
un país dividido
tres abrazos que dar
De entre todas las heroínas de Cain, don James
Mildred no es una asesina
No lo es, porque es su madre
Aunque sea una serpiente del deseo
Poderoso Lucero
Diva devorando a su familia
Diva expresando al sol
La barbie que conocimos ayer
La barbie de Margot
pertenece al mundo de las ideas
obedece a sugerencias de Platón
juega a pasar de un plano a otro de los sueños
ensanchó sus caderas
ama el lápiz de Ruth Handler
en el fondo, viene caminando desde Egipto
tal vez por ello es adulta
y posee cien oficios
*
La mañana está llena de imposibles
Pero nuestra alianza es implacable
46 barbies (las mías)
y también mi alma
definitivamente odiamos a Margot Robbie
imperio de su cuerpo
siglo XXI en su belleza
Mattel ampliando su cintura
Objetivo no logrado en mi templo
Te obedezco lo justo y necesario
Para eso soy un hablante lírico
15 años de experiencia
Alexa conoce mi mando
Gracias a ti me llamo como me llamo
Y, por cierto, tengo más plata que tú.
No he podido encontrar el dardo azul del invierno
Ni la mano que empuja las nubes
Ni la bandera que cubre los cuerpos
Pero acerqué mi sangre a tu alma
Y sentí allí el rumor de la aurora
Tibieza de alegría
El rito de tu pulso en mis brazos
Donde está Isidora
Allí crece la música
Figura en sus canciones
La vibración de su piano
Las ondas que envía a las estrellas
Un jefe de Gobierno Democrático responde ante los Tribunales y el Parlamento
Un tirano responde ante sus generales
La tierra está llena de nombres
En lo etéreo dice Laura
Allá Leticia
En mi cama, simplemente Carola
Isidora llegó desde el cielo
Aterrizó hace 800.000 años con el homo sapiens
Seres que amaban el fuego
y con su almas golpeaban las piedras
mientras viajaban y viajaban.
Saltó hasta el día de ayer: sólo 10.000 años
Las primeras aldeas
Fuego en la noches
El cielo reflejando un camino
Agricultura, exploración y paciencia.
Fuimos luego a Mesopotamia
Sumerios
Escritura sobre el barro
Cuñas
Mitos y leyendas religiosas
Templos
Sacerdotes
Apenas 3500 años AC
Hablamos de rutas paralelas
Egipto
China
La India
Nuestro cruce por Bering muy al norte
Tras los sumerios hablamos de Persia
herederos de Sumerios
Asirios y Caldeos
Europa robada por Zeus
La antigua cultura alimentando a la nueva
Pitágoras viajando por Egipto y Persia
antes de enseñar en Crotona
Sur de la actual Italia
La filosofía surge pensando en el Cosmos
Tales predice un eclipse
Viva el 585 antes de Cristo
Todos discuten sobre el Arché
Principio u origen de todas las cosas
El agua lo fue para Tales
Otros sugieren la tierra, el aire y el viento
Otros apuntan al logos
Pitágoras dice: los números
En política, Atenas y su siglo de Oro
La Democracia
Era entres las guerras médicas
-esas de Termópilas, Maratón y Salamina-
y la contienda del Peloponeso
Aquella en que sólo quedó parada Macedonia
Su falange invencible
2000 crucificados en Tiro
Imagina los aromas que percibió Alejandro en Egipto
Piensa en Persépolis incendiada
Escucha el ruido de sus caballos en La India
Sus generales herederos
Cleopatra y Herodes descendientes
Roma como nueva potencia
Monarquía y República
Guerra como una industria
Julio cruzando el Rubicón
Augusto y su dinastía Julia
Augusto y su Censo
El Imperio
Isidora despertó para mí
Para tratar de ingresar a la Nueva Escuela
Traducir a la portera
Perder conmigo la visón de sus luces
El resplandor de sus sueños
Luego Washington Square y sus espíritus
Conversación entre África y Mongolia
Búsqueda de esculturas perdidas
Yoghurt y queso cottage en la Quinta Avenida
Broadway, un alma salta y se inyecta
Rostro oculto
Lo humano en medio del consumo
*
Lentejas en el Pan Cotidiano
Un joven Picasso sobre la calle 89
Gego, alambrando el espacio
De fiesta en el Paris de Antaño
Isidora descifrando una escalera
Madison observando a Carola.
Más tarde JFK en tarifa oficial de 70 verdes
Una hora de viaje
24 B del terminal 4
Nuevo encuentro con sanpolinos
Despegamos abrazados
Los fabulosos con ella
ET conmigo
Un vampiro con mi hija
El pasajero más tierno se duerme
Amanecí caminado la Quinta Avenida
Nueva Escuela en calle 13
Regreso por Sexta Avenida
Una nueva ruta para el desayuno.
Almuerzo industrial en Mueso de Dinosaurios
y Bing Bang
Aparición del Lago
Refugio en el bosque
un abrazo de tres.
Partimos luego hacia Broadway
Nos conduce un espíritu políglota
Senegal enervado con Francia
Colonialismo pasa la cuenta
.
Nos espera
Funny Girl pertenece a Nueva York
Dos veces heroína
Dos épocas
Dos cantantes
La ciudad ante seres de luz
.
Como el Bagel o Irving Berlin
Nos sumergimos en ella una tarde de calor
Luego de dinosauros y desayuno italiano
Quinta Avenida de Canoli
Caprese
Tras la obra
Caminar por la plaza del tiempo
Ravioles empanada en mesas de la calle
hongos en ciudad que no duerme
Cuarto intento de subir a los cielos
y la pantalla dice "cancelado"
la empleada añade ¿Cómo llegaron a Columbus?
pero John Glenn sonríe y nos da una mano
llaman a la central de la central
y nos abren paso.
Viajo junto a un piloto que estudia
mientras yo cumplo mi sueño
Sinfonía del Nuevo Mundo
sobre la gran pradera
más tarde Uno sobre Manhattan
Grande el polaco Goyeneche
La mujer libre lo escucha
deja su antorcha en el suelo
y nada desnuda a Buenos Aires
Bienvenidos a Newak
1500 metras hasta las maletas
fila de taxis amarillos
Túnel del Gran Capitán
Nuestro Hotel en la 28
Bendita calle de Magnolias
En el almuerzo: ostras
almejas diminutas
cristal de vino blanco
siesta bajo la sombra del Empire State
Por la tarde, escaleras mecánicas de madera
Isi se abraza a su vestido
Carola hermosa sobre zapatos de fiesta
Avenida Séptima, la de la moda
Habitación con dos camas
Ombligo del mundo.
Soy un tigre
Mi espíritu rodea y seduce a las personas
Huele problemas encelulares
Sé de miedos y somnolencias
Poseo elegancia profunda
Algo inusual en el Midwest
Jamás almorzaría hamburguesas
Candies
Porotos dulces
Helados Savory
Hot dog
Espantosos fideos con queso
Tengo algo de magia selvática
Imperio de la India
Astucia de matador
Hermandad entre la lluvia y el sol
Mi presa Carola está cansada
Podrá zamparla con un estirón de lengua
y compartirla con los cisnes
en homenaje a su belleza
A Isidora podría atraparla
en tres segundos
dejarla para la cena
carne alegre
carne con aroma a mar
A Gonzalo lo dejo pasar
Los poetas tienen demasiada sal
Exageran
Se tornan fantasmas
Son grasosos
Destruyen la selva y su paz
En definitiva no comí a ninguno
Le temo a los jardineros de Dublin
Grayhound
Las madres con carritos para cuatrillizos
Armas químicas de Núñez, Leticia
Isidora me busca para que le de calor
Para darle amparo
Abrigarse con mi camisola
La noche sigue su andar entre el follaje
Los pequeños pueblos
La rodillas tibias de Carola
*
Amanece y Pablo le canta a Santiago
Hay una parada en Pittsburgh
Otra en Cambridge
Y por fin Columbus
Ciudad de Leticia
Concretamente Dublin
Barrio de forestas y zorrillos
Ardillas
Lugar seguro de América.
*
Aquí Leti nos acoge
chocolate con naranja del edén
lentejas y salmón
ensalada exquisita
papas doradas
vino sumamente rosado
cerezas
café dulce y con nieve.
*
Conversamos con mi padre
Lavamos ropa
Llenamos de agua y jabón nuestros cuerpos
Dormimos siesta
Vamos de compras
Cuidos a Isidora
Preparamos nuestras alas
Compartimos espumante bañado en Ramazotti
Fue una jornada dura
Comenzó bajo el sol en el Hudson
Parque de Libertades
Sendero guiado desde el cielo
Conversar Puerto Rico
Navegar mirando la ciudad
Almorzar junto a los yates
Tártaro de atún
Caldo de almejas
Espumante
Tres mini hamburguesas con destino a tus quince años
Luego, retorno a Hoboken
Malabares en Uber
Travesía suave hacia Newark
Entonces, música disonante
Vuelo cancelado por tormenta
Alternativa a 24 horas
Nuestro ingenio cae a los buses
Cae bajo en realidad
Babel in inglés villero
Port Authority y su nido de buses
0421 Greyhound
Sólo Warner quiso ayudarnos
Conectarnos a la puerta 68
20.15 que son 22.00
Sin explicaciones
Sin disculpas
Sólo: "No sabemos, tienen que esperar".
Los pasajeros van silentes en su tristeza
Rapados, cavos, tatuados
12 horas de viajar y detenerse
cruzar bosques de Pensilvania
Observar siervos.
Nos acompañan 7 samurais
Pablo y Silvio
Isabel Parra
Sinfonía Oxford
Coltrane y Serrat
Primavera en los Apalaches
15 minutos para huevos duros y pipí
Hora de dormir entre los bosques
Desde hoy podemos decir que comes caracoles
Niña que compra chocolates en en el MET
Recuerda a su abuelo al observar sillas pequeñas
Observa los colores de un templo egipcio
Lee los rostros de los muertos
Nuestros queridos griegos de Egipto
Te detienes a observar los zapatos de Van Gogh
Su autorretrato
Un Arlequín de Picasso
Conversamos la Comedia del Arte
La imagen de Isis Afrodita
Habitación de un artista en Paris del 900
Mas adelante Monet, Camille
Su esposa nueva
Su casi hija
Los nenúfares
Mediodía en Reims
Degas observando bailarinas
Tolousse Latrec y Matisse explorando los rojos
Rousseau asustó a Isidora con su León.
Cezanne, montañas y frutas
Abandono del mundo observado
Braque, otra vía al cubismo
Conversamos bastante sobre Courbet
Maestro Ingres expresa ideales
Gustav aborda la realidad
Cejas que se unen
Estrías
Venas en los pechos
Abdómenes en la sombra del bosque
En otra sala, las galaxias de Matta
El caos de Jackson Pollock
Las armaduras
El piando forte
Tambores de Africa
Presencia de un Stradivarius
Un arpa nacida en China
Al salir
buscamos sombra en Central Park
Carola lee su Gramercy Park
y surge en mi alma el Vamos!
Uber no falla y nos lleva a ese mundo
sueño verde enrejado
llaves sólo para vecinos
y socios del Club de Artistas
A 200 metros
La Boucherie
Tú la buscas con georreferencia
Carola brilla de alegría
Pâté en croûteVichysoisse
tus seres de armadura y verdor
hubo también sidra y vino rosa
Pari Brest
Crème Brûlée
queso
y Aperitif Justice
Nuestra mesa está en el borde de la calle
Manhattan pasa en parada
Junto a nosotros Sex in the City
Conversan de calzones y niños
Afición a garabatos
Tú operas de traductora
Celebramos la alegría de vivir
Nos costó reponernos de la caminata
Aquella persecución del fuego
Pero el Gran Capitán nos esperaba en su Centro
El Path nos llevó a la calle 33
Luego taxi, champagne, Giselle
Impresionó el Segundo Acto
Aquella hermandad de novias
Sus columnas
El lazo de unión
El aire en que viajaban los sueños
Luego almuerzo en Columbus Circle
Reservorio te tartines
Almirante saludando a Central Park
Cuba sonríe y el postre se quema
Tras ello
Viaje en red line hacia el Ferry South
Ir y volver a Staten Island
Saludar la creación de Bartholdi
Revelación de candies
Caminar la rivera del Hudson
Volver a Holanda montando un Audi
Dormimos entre 10 y 12 horas
Isidora con especial ahínco
A mi me despertó Aaaron Copland
La idea: mostrarme su Escuela de Investigación Social
Me adelanto y traigo el desayuno a la habitación
Pasteles daneses
Café con leche
Te
Manzana
Plátano
Carola tiene una sesión de pago de cuentas
Hay un extenso período de baños
Tipo once volvemos a salir
El agua de los cielos se derrumba
Son las primeras notas de este cuatro de julio
El camino del estacinamiento nos deja pronto en la estación
33 street y World TRade Center bos aproximan al Moma
Pero el calor de la estación me afecta y busco un atajo.
Tomamos otro tren y creo haber llegado a Tribeca
Abordamos un taxi blanco que dice New Jersey
Nos dice que nos lleva al MOMA , pero no sabe donde está
Recáspita, aún estamos en Jersey City
¿Cómo si partimos junto al túnel?
Mi cabeza se retuerce y responde.
Claro, estamos junto al túnel de automóviles
El ingenio del path es otro
Cortamos por lo rápido y uber nos ayuda
Pronto, Tribeca, Soho, Quinta Avenida
La puerta del museo junto a nosotros
Isidora adolescente tiene entrada libre.
En el Lobby las imágenes giran y se retuercen
sacan sus brazos de la pantalla
Mutan de colores
Combinan obras
Inteligencia Artificial is working for us
Pronto al quinto piso
Videos de guerra y publicidad
Televisores antiguos
Un distinguido poto en la distancia
En el el cuarto, Carola vibra con retratos de personas
Yo saludo a Emiliano Zapata
Frida, Picasso, el rojo Matisse de Carola
La niña de mi brazo. No se vaya a quedar atrás.
Almuerzo en la terraza.
"En busca de la trucha" se llamaba mi plato
Una kiche de benrnjenas y queso de cabra bendijo la boca de Isidora
Un sandwich de roastbeef para el pulcro paladar de Carola
Un torta de chocolate triple cerró el ritual
Luego a Central Park
Los senderos nos llevaron a puentes
estatuas
túneles
Shakespeare
Colón
El zoológico.
Tipo cinco tomamos el metro hacia el downtown
Línea N que pasa por Canal Street
Claro, pasa y luego salta a Brooklyn
Segundo error de la jornada
Lo remedio gracias a Isi y su dato de la línea R
Nos bajamos en Whitehall
y de pronto la sorpresa
Julián de Saint Paul está allí con su padre, su hermana y Janet
Fantástico. Coincidencia entre coincidencias.
Abandonamos nuestro plan de esperar en la costa sur del River East
y los seguimos a la 42 vía Grand Central
y su techo estrellado
para caminar entre multitudes con la piel pegada a Isidora
ser desviados a la 49
compartir una pizza
ver apenas unas luces entre el ramaje de un gran árbol
Y Carola se recuperó gracias a la compañía
Caminó largos trechos
Conversó con alegría
Habló de su vida, sus talleres, su familia
En la noche comida árabe
Otro uber de retorno
Dormir, dormir, como en una fiesta de sueños.