rosa boca y estrella
toro en el centro de los hombres
ola besando el destino
puños cerrados como piedras
agua en el inicio de los sueños
Puse todo mi hechizo en tu cuerpo
todo mi viento secreto
todo ligero equilibrio
todo el dolor de la tierra
Este texto conversa con Nizar Qabbani en :
es que no pueda quererte más…
Y lo que a mis cinco sentidos más angustia
es que solo sean… cinco…
Una mujer extraordinaria como tú
necesita extraordinarios sentimientos
pasiones extraordinarias
extraordinarias lágrimas
y una cuarta religión
que tiene sus normas y sus ritos, su paraíso y su infierno.
Una mujer como tú
necesita libros que para ella sola sean escritos…
y una especial tristeza para ella sola
y una muerte especial para ella sola
y un tiempo con millones de cuartos
que sólo ella habite…
Pero yo, pobre de mí,
no puedo moldear los segundos
en forma de anillos y ponerlos en tus dedos
porque el año se ordena por meses
los meses por semanas
las semanas por días
y mis días están dictados por el paso de la noche y la mañana
en el violeta de tus ojos.
2
Lo que más me atormenta del lenguaje… Es que no sea suficiente…
Y lo que más me angustia de la escritura es que no te describa.
Eres una mujer difícil…
una mujer que no ha sido escrita…
Mis palabras jadean como caballos en tus colinas…
y no son suficientes para cruzar tus iluminadas distancias…
No hay dificultad contigo…
mi dificultad es tu alfabeto…
que con veintiocho letras, no me basta para cubrir
un centímetro de tu cuerpo…
ni para elevar una plegaria de agradecimiento
a tu bello rostro…
Lo que en tí me entristece
es que seas muchas mujeres
y el lenguaje uno…
¿Qué propones que haga
para corregir mi lenguaje
y apartar esta lejanía
entre el barro y los dedos,
entre tu lisa extensión
y mis enterrados ríos en el hielo,
entre el océano de tu cintura
y la avidez de mis naves
en descubrir la redondez de la tierra?
La fotografía de la poeta Maram Al Masri, musa del célebre vate Sirio que hoy convocamos, proviene de este sitio.
Este texto conversa con Nizar Qabbani en :
Amor extraordinario... por una extraordinaria mujer
Lo que en tu amor más me atormenta …
es que no pueda quererte más…
Y lo que a mis cinco sentidos más angustia
es que solo sean… cinco…
Una mujer extraordinaria como tú
necesita extraordinarios sentimientos
pasiones extraordinarias
extraordinarias lágrimas
y una cuarta religión
que tiene sus normas y sus ritos, su paraíso y su infierno.
Una mujer como tú
necesita libros que para ella sola sean escritos…
y una especial tristeza para ella sola
y una muerte especial para ella sola
y un tiempo con millones de cuartos
que sólo ella habite…
Pero yo, pobre de mí,
no puedo moldear los segundos
en forma de anillos y ponerlos en tus dedos
porque el año se ordena por meses
los meses por semanas
las semanas por días
y mis días están dictados por el paso de la noche y la mañana
en el violeta de tus ojos.
2
Lo que más me atormenta del lenguaje… Es que no sea suficiente…
Y lo que más me angustia de la escritura es que no te describa.
Eres una mujer difícil…
una mujer que no ha sido escrita…
Mis palabras jadean como caballos en tus colinas…
y no son suficientes para cruzar tus iluminadas distancias…
No hay dificultad contigo…
mi dificultad es tu alfabeto…
que con veintiocho letras, no me basta para cubrir
un centímetro de tu cuerpo…
ni para elevar una plegaria de agradecimiento
a tu bello rostro…
Lo que en tí me entristece
es que seas muchas mujeres
y el lenguaje uno…
¿Qué propones que haga
para corregir mi lenguaje
y apartar esta lejanía
entre el barro y los dedos,
entre tu lisa extensión
y mis enterrados ríos en el hielo,
entre el océano de tu cintura
y la avidez de mis naves
en descubrir la redondez de la tierra?
La fotografía de la poeta Maram Al Masri, musa del célebre vate Sirio que hoy convocamos, proviene de este sitio.