Fui por un tiempo
muy cercano a una flor
Como un pequeño caudal de agua
besaba sus raíces
con mis labios transparentes
imaginaba su capullo
pensándola espléndida y única
como libro leído por Dios
Ahora
sigo pasando por aquel sitio
Allí
donde antes hubo una flor
sigue el poema humedeciendo su espíritu
y llora en secreto la sombra de Dios
Ahora llego
colmando mis labios de excrementos
inmunda verdad de esta agonía
ausencia de raíces y letras
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