Vida, no me digas nada
Así es la enfermedad
El aliento de la muerte
El avance de lo que de acerca
Vida, no me digas nada
Así es la enfermedad
El aliento de la muerte
El avance de lo que de acerca
Almorcé con Juan
Él trajo su alegría de Maestro
Sus misas sin persignarse
Su poema de fuego sobre la tierra.
Hablamos sobre Templanza
Grecia
Los 70
Nuestros padres en Alejandría
la logia "Roosevelt"
Andanzas de Pedro Massai
Nuestra casa y las que le precedieron
Estaban también Alejandro
Christian, Eduardo, Pedro
Ciertamente Pablo
y el Covid que habitaba en mis huesos.
Juan mencionó los guantes
El tiempo de los relatores
Lo acotado de los aportes
Tres de la tarde como hora de cierre.
Olga me mostró el oficio y la puerta
La sala sagrada
El espacio en que habla el creador.
Hay espíritus que muerden
Pequeños vampiros de primavera
Soldados de Mariupol
Gendarmes en la frontera del infierno
Hoy varios gritaban el el bus
Juraron matar al conductor
Después comérselo y brindar con su sangre
Para eso son guardianes del fuego
Caínes con motores de dolor
Dónde se fue tu abrazo de ayer?
Tu peso en mi cama
Cierto resplandor de tu pijama
Un caldo de estrellas en tu regazo
La estrella matutina descansa en mi cama
Usa un pijama rosado
Ama a Jan Austen
En marzo o en días de incendio
Es claridad de vida
Siempre un regalo del cielo
Hoy llega el fuego a nuestro hogar
El Maestro y cuarenta espíritus lo conducen
Estrella de humanidad
Conciencia construyendo conductas
Amor desplegando su fuerza
La rosa eterna despertando sobre el altar
En el Oriente y la palabra: Juan Reyes
Sereno en su elevada conciencia
Diestro en compás y escuadra
Justo al emplear su mallete
Maestro, un ejemplo de Maestro
Por mi parte, traigo piedras extraídas del Jordán
El libro que en griego escribieron los 70
Cartas de Pablo en el mismo idioma
Evangelios trazados en el habla de Safo
y cifrados con los signos de Pitágoras
Imagino las jornadas que adornarán tu memoria
Dulces instantes de alegría
Tragos amargos que pronto olvidaremos
Ideas burbujeando en las planchas
Diálogos cubriendo el mosaico
Nuestros himnos cantados en unión
La charla artística
está fundando un país
aparecen cuentos poemas
recuerdos de padres y abuelos
seguro, una canción sobre el río
Matice hudební
El domingo ha hecho mudo su nombre
y este lunes nos regala su niebla
resaca del Oscar
tareas de Antofagasta
mi alma entre líneas de un texto
Lo que queda atrás son mis fotos de niño
Mi bañera celeste de plástico
Frank Sinatra, mi soldadito de juguete
Winnie, mi oso de peluche
El sabor azucarado del jarabe dental de mi abuelo
Los libros que fueron de mi padre
El closet con botellas vacías
la foto de mis ancestros en el cuarto de la Mila
la misma de ahora en la estancia de Isidora.
Invoco a mis ancestros en la cordilleras
Lo hago al referirme al año del ñauca (ñaupa en quechua)
Al presentar mi rostro a la luna
y cantar una vidala
o elevar mi quena hacia las estrellas
Te quiero hija
Sol que camina tan rápido
Niña de estrellas
Ojos en que miro a mi madre
Ojos en que veo a mis abuelas
Un poco de energía para mi carne
Tal vez un dardo de nieve
Una palabra de Óscar Peterson
La tarde bailando junto a ti
La herradura cuelga del acero
Cierto clavo sobre la puerta
Ella le falta a pegasus
Mi corcel volador
Al clavo lo llaman rayo del tiempo
Yo: El palo del minutero
El domingo cayó de su yegua
Su cabeza se golpeó contra una piedra
Acudí con veinte corazones en mi mano
Bebí la sangre que brotaba
Ahora llevo en mi alma los secretos del tiempo
Me duelen las piernas Isidora
Arrastro el cemento de la cancha
La luz de siete estrellas
Muchos años que pesan sobre mis hombros
Eligí escribirte Josephine
Aceptar tu pantera y tu serpiente
Tu beso inundado de estrellas
Tus ojos llenos de danza
La belleza que cargas en tu cuerpo