Vamos en tren y hay calor
El agua helada falta en mi espalda
Falta calma en mi espíritu
El consejo de Juan Reyes
La luna con su rostro de noche
Vamos en tren y hay calor
El agua helada falta en mi espalda
Falta calma en mi espíritu
El consejo de Juan Reyes
La luna con su rostro de noche
Imagina Gonzalo que te calma la esperanza
Y prefieres el agua a nuestro fuego
Hombre volando sobre palacios
Espíritu templado por la lluvia
Aire y viento sobre la Plaza Victoria
Apenas cabe el verano en mi cuerpo
Pero no tengo ganas de quejarme
Sino de caminar junto al mar
Llamar a todas las Cecilias
Saltar las cuerda de lo diferente
ABCDTemplanza
La niña estuvo feliz con sus regalos
Imaginó colores para crear su mundo
Su poema de luz cayendo sobre hojas en blanco
Bendita niña poblada de estrellas
Ser hecha de tiempo y agua
Fabiana ante las puertas del tiempo
¿Quién eres?
Tal vez uno que abrazó al Maestro
Ese que buscó agua limpia para compartirla
El que leyó sobre Job
Aquel que mordió racimos de uva
Yo al interior de mi madre
Ese que amó a la mujer de su prójimo
Pasé la noche buscando nuestra Luna
Resplandor de tu ternura
Voces que usas para abrazar
Tu tibieza que aloja en mi alegría
Mi fiesta son tus ojos
La tela verde que cubre tu cuerpo
El canto de tu nombre
Poderes que ejerces sobre mi alma
Ha cruzado una gaviota
Una segunda y la que forma el número tres
Hay un barco con sus luces encendidas
Son tres lámparas brillando poco antes de las nueve
La aves graznan
Hay ruidos de automóviles
Carola e Isidora conversan en el living
Yo pienso en mi madre y en Myriam
Pasteles de La Ligua
Camila despierta en el Hospital
Buscaré en Venecia tus zapatos rojos
Las flores que cuidaron tus manos
La plaza en que bailaste tango
Y si encuentro un poco de ti
Miraré a la Luna y bridaré por tu presencia
Desde hace algunos días
Observo cuerpos de palomas muertas
Alguien las está envenenando
Aparecen en Recreo y en Montaña
Abordan los ojos de mi mañana
Me perturban
Pienso en rifles y automóviles
En signos
El cielo atacado sin piedad
Hay signos sobre el planeta
Sombras caminando junto al mar
Hechiceros colmados de millones
Fanáticos al borde de estrellarse
Masivo desinterés
Franja por donde pasa la muerte
El sol ha brillado sobre la tierra
Dejó sus zapatos sobre la arena
y ahora se esconde tras las montañas
Carola lo sabe y duerme
Yo lo escribo en este vacío
Herzog lo pinta con luz
Querido Washington Post
La Oscuridad no es sólo falta de información
Lo es también el exceso
Prioridades arbitrarias
Bulos y engaños
Inocencia erguida antes los monstruos de internet
Escribí para ti los parques de Nueva York
Las piedras del Mar de Galilea
Algunas calles de Belén
El alma que dejaste en el Mediterráneo
Risa y lágrimas de Isidora
*
Llegué a tu rostro con un ramo de Gardenias
Noches de Atenas
Nuestro Museo de la Inocencia
Hilos de metal en las elipsis del Guggenheim
9 puertas de Santa Sofía
Columnas sumergidas para sostener el agua
*
Estuve contigo en el Harem
El Muro
Las riberas de Chipre
La montaña aquella de las Bienaventuranzas
El pequeño bosque de la Academia
Aquel camino de Jesús entre comerciantes
*
Bailamos juntos en un yate sobre el Bósforo
Te besé en Buenos Aires
Te vi de lejos en el Colón
Estuvimos piel a piel con Edith Piaf
*
En tantas partes fuimos sístole y diástole
Sueños que se unen en el cielo
Luna y Lucero
Dos rostros del mismo Dios
Teresa viene saliendo de su piel
Saliendo de Chile que no termina de nacer
Días de guerra en su alma
En su patria interior
Frontera sur entre ella y las estrellas
*
Teresa ha cruzado su piel
Ha salido de un jardín con gatos
Ha emigrado desde el Rock
Rollos de Torah
Sombra y Calor junto al muro de los lamentos
*
Teresa se ha bañado en el Jordán
Todos nadamos en esas aguas tibias
Había ciudades dormidas bajo las piedras
y una luna de verano sobre este Shabat de sangre
Trepé del azul al color de mi nombre
Apagué y encendí los fuegos
Mentí sobre el silencio
Fui aurora gris, mas no un grito de la noche
Impuro y mañoso fui
Caminé sobre el filo de las normas
Me engañé y me perdí
Fui llanto sobre tierra ignota
Estuve en el boque infranqueable
Sentí los latidos de lobo
Fui presa y cazador en la noche
Viento que mueve las hojas
Elegí caminar bajo la llovizna
Entender a la leche sobre el café
Heredar silencios
Sentir el espíritu de mi madre
Violar cuando tengo permiso
Esta navidad Isidora
El sol sobre su rostro
Su alegría
Sus sobresaltos
La vida mencionando su nombre
Todos comimos tus galletas
Estaban las de miel con paraguas de chocolate
Las de nuez con sus pinturas verdes y rojas
Las estrellas de almendra
con escudos de azúcar