Mauricio ha insistido en morirse.
Ahora conversa más allá de vasos quebrados,
liberado de su propia inteligencia,
por fin desnudo de todo peso,
desgajado de sí mismo,
hombre evadido de nuestro infierno.
La imagen está tomada del Blog de
Teresa Calderón
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
si discrepas conmigo, me enriqueces.