Murió Gonzalo Rojas
y un potro demoledor
está cruzando los cielos de Lebu.
Los espejos derraman lágrimas
y en Cártago
las olas hablan de su poder
sus miles de palabras
la luz en cada sílaba.
Murió Gonzalo Rojas
y ahora lo recibe su Quevedo
su Gabriela
su temerario sueño
de un Gonzalo tras otro.
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http://elcuartitodepensar.blogspot.com
otro ciclo que termina, sus creaciones nos arropan
ResponderBorrarQue en paz descanse.
ResponderBorrarBonito homenaje.
ResponderBorrarDEP
Qué homenaje tan hermoso. Hombres como él nunca mueren. Un abrazo, querido amigo.
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